El mundo del deporte extremo está de luto tras confirmarse la muerte de Felix Baumgartner, el paracaidista austríaco que en 2012 asombró al planeta al lanzarse desde la estratósfera y romper la barrera del sonido. Baumgartner falleció el jueves 18 de julio a los 56 años, tras sufrir un accidente mientras practicaba parapente en la localidad costera de Porto Sant’Elpidio, en la región italiana de Las Marcas.
Según reportes preliminares, el deportista experimentó un malestar repentino durante el vuelo, lo que le hizo perder el control del equipo y precipitarse sobre la piscina de un hotel. Aunque los servicios de emergencia acudieron al lugar, Baumgartner ya no presentaba signos vitales. Una joven resultó herida en el incidente, pero se encuentra fuera de peligro.
Baumgartner alcanzó fama mundial el 14 de octubre de 2012, cuando se lanzó desde 38,969 metros de altura como parte del proyecto Red Bull Stratos. Durante su caída libre, superó los 1,340 km/h, convirtiéndose en el primer ser humano en romper la barrera del sonido sin asistencia mecánica. Su hazaña fue seguida en vivo por millones de personas y le valió tres récords Guinness.
Además de su salto histórico, Baumgartner fue reconocido por otras proezas como cruzar el Canal de la Mancha en caída libre, realizar saltos BASE desde monumentos emblemáticos y participar en misiones de rescate aéreo. Su legado trasciende el deporte, al haber contribuido al desarrollo de tecnología aeroespacial y protocolos de seguridad en vuelos de gran altitud.
Las autoridades italianas continúan investigando las causas exactas del accidente. La comunidad internacional de deportes extremos ha comenzado a rendir homenaje a quien fue considerado un símbolo de audacia, precisión y superación humana.