
Nueva técnica de conteo de fauna silvestre ayuda a monitorear población de tortugas amenazadas
Investigadores de la Universidad de Florida han creado un método más preciso para el conteo de fauna silvestre mediante drones. El equipo combinó imágenes aéreas captadas por drones con modelos estadísticos avanzados para identificar y contabilizar más de 41,000 tortugas gigantes de río sudamericanas a lo largo del río Guaporé, en la Amazonia, una especie de tortuga amenazada. Sus resultados, publicados en la Revista de Ecología Aplicada , ofrecen a los conservacionistas un nuevo y valioso enfoque para monitorear con mayor precisión las poblaciones de animales en riesgo.
“Describimos una forma novedosa de monitorear de forma más eficiente las poblaciones animales”, afirmó el autor principal del estudio, Ismael Brack, investigador postdoctoral de la Facultad de Ciencias Forestales, Pesqueras y Geomáticas del Instituto de Ciencias Alimentarias y Agrícolas de la Universidad de Florida. “Y aunque el método se utiliza para el conteo de tortugas, también podría aplicarse a otras especies”.
Estas tortugas son criaturas excepcionalmente sociables, y las hembras se congregan cada año en julio o agosto para anidar en los bancos de arena del río Guaporé, entre Brasil y Bolivia. Ahí, científicos de la Wildlife Conservation Society, ya usaban drones para contar animales, para lo que usaban ortomosaicos, imágenes compuestas de alta resolución y gran detalle, creadas mediante la unión de cientos de fotografías aéreas superpuestas.
Contar los animales que se muestran en ortomosaicos es un método más rápido, preciso y menos invasivo que contarlos desde el suelo. Sin embargo, este método por sí solo no tiene en cuenta que los animales a veces se mueven durante la observación. Juntos, investigadores de la UF y la WCS desarrollaron un método que mejora la precisión del conteo al eliminar múltiples fuentes de error, incluidos los conteos dobles (el mismo individuo contado varias veces) y los individuos omitidos.
Según el estudio, los modelos revelaron varias posibles fuentes de error que podrían surgir de los conteos tradicionales basados en ortomosaicos. Por ejemplo, solo el 35 % de las tortugas que usaron el banco de arena estuvieron presentes durante los vuelos de los drones. Y, en promedio, el 20 % de las tortugas detectadas caminando aparecieron varias veces en los ortomosaicos, algunas hasta siete veces.
Los observadores sobre el terreno contaron unas 16,000 tortugas, según el estudio. Los investigadores que revisaron los ortomosaicos, pero no tuvieron en cuenta el movimiento de los animales ni las marcas del caparazón, contaron unas 79,000 tortugas. Sin embargo, al aplicar sus modelos, estimaron unas 41,000 tortugas.
“Al combinar información de múltiples estudios, podemos detectar tendencias poblacionales y la Wildlife Conservation Society sabrá dónde invertir en acciones de conservación”, afirman los investigadores.