
Propone diputado Ricardo Mejía penalizar con 20 años de prisión el reclutamiento forzado
Para visibilizar y sancionar el reclutamiento forzado hasta con 20 años de cárcel, el diputado Ricardo Sóstenes Mejía Berdeja planteó modificar y adicionar diversos artículos del Código Penal Federal y de la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada. Además, se incorpora el reclutamiento forzado como una causa de exclusión de responsabilidad penal para víctimas que hayan sido obligadas a delinquir.
La iniciativa, turnada a la Comisión de Justicia, contempla la adición de un capítulo denominado “Reclutamiento forzado” al Código Penal Federal para incluir la definición del delito como la acción de incorporar, obligar o inducir, por cualquier medio a menores de edad, a formar parte de grupos armados, organizaciones criminales o redes de trata de personas y se impondrá una pena de 10 a 20 años de prisión a quien cometa el delito de reclutamiento forzado, sin perjuicio de las penas que correspondan por otros delitos que resulten.
Propone que aumente la condena cuando las víctimas sean niñas, niños, adolescentes, mujeres o personas en situación de vulnerabilidad, así como actualizar la prescripción del delito en los casos donde se acredite la comisión de reclutamiento forzado.
La pena privativa de la libertad se incrementará en una mitad cuando el reclutamiento forzado se realice a personas menores de dieciocho años, mayor de sesenta años de edad, o que no tenga capacidad para comprender el significado del hecho o capacidad para resistirlo; que la víctima sea una mujer en estado de gravidez, que sea persona migrante o afrodescendiente o pertenezca a un pueblo o comunidad indígena.
Asimismo, que el o los autores sean o hayan sido integrantes de alguna institución de seguridad pública, de procuración o administración de justicia, o de las Fuerzas Armadas mexicanas, o se ostenten como tales sin serlo; sea contra una persona con formación profesional para realizar actividades ilícitas en beneficio de dichos grupos u organizaciones delictivas.
También, que el o los autores tengan vínculos de parentesco, amistad, gratitud, confianza o relación laboral con la víctima o persona relacionada con ésta; que durante su sujeción se cause a la víctima alguna lesión y que en contra de la víctima se hayan ejercido actos de tortura o violencia sexual.
Plantea que cuando tres o más personas se organicen para realizar, en forma permanente o reiterada, conductas que por sí o unidas a otras, tienen como fin o resultado cometer alguno o algunos de los delitos siguientes, serán sancionadas por ese solo hecho, como miembros de la delincuencia organizada.