Desde hace varias semanas se sabe que hay saturación de hospitales. Realidad que no ha querido reconocer el gobierno
El 17 de octubre del año pasado, el presidente Andrés Manuel López Obradorprefirió preservar la vida de cientos de personas en Culiacán, Sinaloa, y liberó aOvidio Guzmán López, el hijo de El Chapo, buscado por Estados Unidos.
Fue una razón incuestionable, que justificó el tremendo ridículo que hizo su gobierno. ¿Qué cambió ahora? ¿Por qué ese mismo gobierno prefiere hoy cuidar su imagen antes que la vida de decenas o cientos de miles de mexicanos?
Hugo López-Gatell, el subsecretario de salud encargado de enfrentar y manejar los números de la pandemia en México, ya reconoció -sin decirlo- que no sabemos y difícilmente conoceremos los números reales. Por displicencia e irresponsabilidad de la 4T se perdieron valiosísimas semanas que tuvimos de ventaja. Supimos con antelación lo que se nos venía encima y no actuamos a tiempo.
Muchos testimonios de médicos en todo el país han denunciado la verdadera magnitud de pandemia de Covid-19. Desde hace varias semanas se sabe que hay saturación de hospitales. Realidad que no ha querido reconocer el gobierno.
Te puede interesar
La versión oficial asegura que estamos aplanando la curva de contagios, pero en base a números irreales. López-Gatell no ha sido claro con la metodología para medir la pandemia. Los números contagios, casos y muertes por Coronavirus en México rayan en lo ridículo.
Expongo dos razones: a) México es uno de los países del mundo que menos pruebas ha aplicado para detectar Covid. b) Tenemos una muy activa frontera -de más de 3 mil kilómetros- con Estados Unidos, el país con más casos y contagios del planeta.
Durante varios días se insistió a Hugo Lopez-Gatell en que explicara la fórmula para calcular el número real de casos. A regañadientes y soberbio, dio una enredada explicación que concluyó en que podíamos considerar más de 104 mil casos hasta hace dos semanas, cuando estábamos lejos de la etapa crítica de contagios y enfermos. Es decir, ni él sabe el número real de casos y muertos, o no los quiere admitir. De lo que no queda duda es que sus números son una mentira.
Tal vez por eso, el Presidente dio su respaldo al subsecretario y acusó una campaña en su contra en la conferencia mañanera de ayer.
BON APPÉTIT
La pandemia de Covid-19 es utilizada también en favor de la impunidad. El empresario Jaime Sacal Micha fue extraditado apenas el viernes pasado de Estados Unidos, acusado de la violación de su nieta durante más de cinco años. Hoy está en su casa. El juez tercero de distrito con sede en Hidalgo, Fredy Francisco Aguilar Pérez, argumentó que por su edad y estado de salud, se encuentra entre la población de riesgo de contagio de Covid-19 y le evitó pisar la cárcel.
El imputado fue entregado a las autoridades mexicanas por las gestiones de la Fiscalía General de la República. Dado que Jaime Sacal Micha estuvo escondido en Estados Unidos durante más de un año y cuenta con los recursos económicos suficientes para huir, la FGR impugnará la resolución.
Te puede interesar
Escucha nuestro podcast sobre Covid-19
Por Alejandro Cacho