Luego del fallecimiento de Erick Leonardo Terán, un niño de 13 años, durante un campamento organizado por la Academia Militarizada Ollin Cuauhtémoc, la institución anunció la reanudación de sus actividades educativas de manera remota, asegurando que el derecho a la educación “no puede ser interrumpido”.

A través de un comunicado, la academia informó que todas las clases y actividades académicas se desarrollarán a distancia hasta nuevo aviso, respetando las disposiciones de las autoridades educativas y con el objetivo de reforzar las medidas de protección civil del plantel.

“Actuamos con base en el principio constitucional del interés superior de la niñez, que nos exige priorizar su desarrollo educativo, emocional y humano”, señaló la institución, destacando que se encuentran a la espera de indicaciones oficiales para la reanudación de las clases presenciales.

Suspensión de actividades y cuestionamientos sobre el campamento

La tragedia de Erick Leonardo Terán llevó a una serie de inspecciones y sanciones contra la academia. El Instituto de Verificación Administrativa de la Ciudad de México (Invea) colocó sellos de suspensión de actividades en el plantel ubicado en la colonia Santa María la Ribera debido a la falta de protocolos de protección civil.

Por su parte, la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México (AEFCM) reveló que, aunque la academia sí estaba incorporada a la Secretaría de Educación Pública (SEP), no realizó trámites para solicitar los permisos correspondientes para llevar a cabo el campamento en Morelos.

La madre del menor, Erika Torbellín, denunció que todos los alumnos fueron obligados a asistir al campamento con una cuota de recuperación de mil 800 pesos. Además, relató que el 25 de abril recibió una llamada donde se le informó que su hijo estaba “un poquito mal” y había sido trasladado a un hospital. Al llegar, los médicos le confirmaron que Erick había fallecido.

Mientras que las autoridades inicialmente atribuyeron la muerte a un desvanecimiento durante el entrenamiento, la necropsia reveló que la causa del deceso fue un estallamiento de vísceras.

La Secretaría de Educación Pública (SEP) anunció una revisión al plantel el 28 de abril para verificar documentación y condiciones del alumnado, pero al llegar encontraron la academia cerrada y sin personal.

Simultáneamente, la Fiscalía General del Estado de Morelos informó a través de un comunicado que realizará una investigación exhaustiva para esclarecer lo sucedido con el menor.

Mientras las indagaciones continúan, la academia sigue en modalidad remota, argumentando que su decisión se fundamenta en la responsabilidad de garantizar la educación de sus alumnos.