Fallece Ozzy Osbourne, leyenda del rock: una vida marcada por la oscuridad, la música y la redención

Fallece Ozzy Osbourne, leyenda del rock: una vida marcada por la oscuridad, la música y la redención

Ozzy Osbourne, ícono absoluto del rock y figura central del heavy metal, falleció a los 76 años, según confirmó su familia este martes. El “Príncipe de las Tinieblas” murió rodeado de sus seres queridos y dejando un legado musical y cultural que transformó para siempre la historia del rock.

Nacido como John Michael Osbourne el 3 de diciembre de 1948 en Aston, Birmingham (Reino Unido), Ozzy surgió desde la clase trabajadora británica para convertirse en el vocalista de Black Sabbath, banda que fundó en 1968 junto a Tony Iommi, Geezer Butler y Bill Ward. Juntos crearon un sonido más crudo, pesado y oscuro que definió las bases del heavy metal.

Canciones como Paranoid, War Pigs y Iron Man convirtieron a Black Sabbath en una banda de culto. La voz aguda, casi agónica de Ozzy, y su presencia magnética en el escenario, hicieron de él un símbolo contracultural desde los años 70. Pero su carrera no estuvo exenta de controversias: su vida fue marcada por el abuso de sustancias, excesos y episodios excéntricos, como el infame momento en que mordió la cabeza de un murciélago durante un concierto en 1982.

Tras ser despedido de Black Sabbath a finales de los 70, Osbourne inició una exitosa carrera como solista, lanzando álbumes como Blizzard of Ozz y Diary of a Madman, que incluyeron clásicos como Crazy Train y Mr. Crowley. Su alianza con el virtuoso guitarrista Randy Rhoads se convirtió en una de las más celebradas del género.

En los años 2000, Ozzy resurgió como una inesperada figura mediática gracias al reality show “The Osbournes”, donde junto a su esposa Sharon y sus hijos, mostró al mundo su vida doméstica llena de caos y humor. Lejos de los escenarios, se volvió entrañable para nuevas generaciones.

En 2019, Ozzy fue diagnosticado con la enfermedad de Parkinson, y aunque su salud se deterioró con los años, nunca dejó de trabajar. Su último concierto fue una despedida emotiva en Birmingham, su ciudad natal, al lado de sus antiguos compañeros de Black Sabbath, con quienes cerró el ciclo de una carrera colosal.

Ozzy Osbourne fue mucho más que un cantante: fue un símbolo de rebeldía, supervivencia y autenticidad. Con su partida, se apaga una de las voces más influyentes de la historia del rock, pero su música —oscura, brutal y profundamente humana— seguirá resonando con fuerza por generaciones.

Fallece Ozzy Osbourne, leyenda del rock: una vida marcada por la oscuridad, la música y la redención

Ozzy Osbourne, ícono absoluto del rock y figura central del heavy metal, falleció a los 76 años, según confirmó su familia este martes. El “Príncipe de las Tinieblas” murió rodeado de sus seres queridos y dejando un legado musical y cultural que transformó para siempre la historia del rock.

Nacido como John Michael Osbourne el 3 de diciembre de 1948 en Aston, Birmingham (Reino Unido), Ozzy surgió desde la clase trabajadora británica para convertirse en el vocalista de Black Sabbath, banda que fundó en 1968 junto a Tony Iommi, Geezer Butler y Bill Ward. Juntos crearon un sonido más crudo, pesado y oscuro que definió las bases del heavy metal.

Canciones como Paranoid, War Pigs y Iron Man convirtieron a Black Sabbath en una banda de culto. La voz aguda, casi agónica de Ozzy, y su presencia magnética en el escenario, hicieron de él un símbolo contracultural desde los años 70. Pero su carrera no estuvo exenta de controversias: su vida fue marcada por el abuso de sustancias, excesos y episodios excéntricos, como el infame momento en que mordió la cabeza de un murciélago durante un concierto en 1982.

Tras ser despedido de Black Sabbath a finales de los 70, Osbourne inició una exitosa carrera como solista, lanzando álbumes como Blizzard of Ozz y Diary of a Madman, que incluyeron clásicos como Crazy Train y Mr. Crowley. Su alianza con el virtuoso guitarrista Randy Rhoads se convirtió en una de las más celebradas del género.

En los años 2000, Ozzy resurgió como una inesperada figura mediática gracias al reality show “The Osbournes”, donde junto a su esposa Sharon y sus hijos, mostró al mundo su vida doméstica llena de caos y humor. Lejos de los escenarios, se volvió entrañable para nuevas generaciones.

En 2019, Ozzy fue diagnosticado con la enfermedad de Parkinson, y aunque su salud se deterioró con los años, nunca dejó de trabajar. Su último concierto fue una despedida emotiva en Birmingham, su ciudad natal, al lado de sus antiguos compañeros de Black Sabbath, con quienes cerró el ciclo de una carrera colosal.

Ozzy Osbourne fue mucho más que un cantante: fue un símbolo de rebeldía, supervivencia y autenticidad. Con su partida, se apaga una de las voces más influyentes de la historia del rock, pero su música —oscura, brutal y profundamente humana— seguirá resonando con fuerza por generaciones.

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