Washington.— El mariscal de campo Jalen Hurts decidió no asistir a la Casa Blanca junto a las Águilas de Filadelfia, recientes campeones del Super Tazón, en su encuentro con el presidente Donald Trump. Según fuentes oficiales, Hurts y otros jugadores argumentaron conflictos de agenda para justificar su ausencia.
Pese a ello, Trump elogió al quarterback, calificándolo como un “jugador magnífico” que lideró una temporada regular de 14-3 y una destacada postemporada. Esta no es la primera vez que una visita de los Eagles genera controversia: en 2018, tras su primer campeonato, el mandatario canceló la celebración oficial luego de que varios jugadores rechazaran la invitación en solidaridad con Colin Kaepernick y sus protestas contra la brutalidad policial.
Consultado recientemente sobre su participación, Hurts evitó responder directamente y se retiró en silencio, alimentando las especulaciones sobre una decisión con carga política o personal.
En contraste, el corredor estrella Saquon Barkley sí participó activamente. Barkley se reunió con Trump en el Trump National Golf Club y voló con él a Washington en el Air Force One, para luego trasladarse juntos en el Marine One hacia la Casa Blanca. Ante las críticas por su cercanía con el exmandatario, Barkley defendió su posición argumentando respeto por la institución presidencial.
Barkley escribió en la red social X.
Traducido
Jajaja, algunas personas están realmente molestas porque jugué golf y volé a la Casa Blanca con el PRESIDENTE. Tal vez simplemente respeto el cargo, no es un concepto difícil de entender. Jugué golf con Obama no hace mucho… ¡y espero terminar mi ronda con Trump! Ahora salgan de mis menciones con toda esta política y que tengan un día increíble.