Las fuertes lluvias registradas en Jordania provocaron una escena impactante en la ciudad arqueológica de Petra, uno de los destinos turísticos más importantes del mundo. En cuestión de minutos, las gargantas de piedra que rodean el emblemático Tesoro se transformaron en ríos, obligando a cientos de turistas a buscar refugio mientras el agua corría con fuerza a través del estrecho cañón del Siq.

Videos compartidos en redes sociales muestran cómo las corrientes descendían rápidamente por los caminos normalmente secos, arrastrando tierra y piedras. Las autoridades jordanas activaron de inmediato protocolos de emergencia para evacuar a los visitantes, dos turistas belgas fallecieron y al menos 1.800 personas fueron evacuadas tras las crecidas de varios cauces en la región de Shobak obligó al cierre del yacimiento nabateo y garantizar la seguridad en la zona.

Petra, declarada Patrimonio Mundial de la UNESCO, es un símbolo nacional de Jordania y uno de los sitios arqueológicos más visitados del Medio Oriente. Expertos han advertido que fenómenos como este podrían repetirse con mayor frecuencia debido al cambio climático, por lo que instaron a reforzar las medidas de prevención para proteger tanto a los visitantes como al invaluable legado arquitectónico.