México Femenil logró una victoria histórica al derrotar a Brasil en penales (3-1) y quedarse con el tercer lugar del Mundial Sub 17, tras un partido vibrante disputado en el Estadio Olímpico de Rabat. El encuentro terminó 1-1 en tiempo regular, pero la figura de Valentina Murrieta emergió como la gran heroína al detener dos disparos decisivos.
El partido estuvo cargado de emociones, tensión y jugadas que marcaron un antes y un después para esta generación del Tri Femenil. Con carácter, talento y determinación, las Adelitas demostraron que el futbol mexicano femenino vive uno de sus mejores momentos internacionales.
Desde el inicio del encuentro, México mostró orden y disciplina, mientras que Brasil apostó por su potencia ofensiva. Sin embargo, el equilibrio dominó la mayor parte del duelo y todo se definió gracias al temple mostrado en la recta final y en la tanda de penales.
La afición mexicana celebró con euforia el triunfo que coloca a la Selección Sub 17 entre las mejores del mundo. Este resultado reafirma el crecimiento del proyecto femenil y posiciona a la nueva generación como una de las más competitivas de los últimos años.
Murrieta, la heroína del Tri en la Sub 17
El dramatismo comenzó desde los once pasos. Brasil inició con ventaja luego del tanto de Gabi Pusch, pero la capitana Ibarra igualó la serie con un disparo contundente. La presión aumentó cuando Alvarado falló y Dulce María envió su tiro al travesaño, dejando a México contra la pared.
Sin embargo, la historia cambió gracias a Valentina Murrieta, quien detuvo el disparo de Kaylane con una estirada espectacular. Minutos después, volvió a brillar al tapar con los pies el tiro de Pereira, una acción que desató la celebración en la tribuna mexicana.
Villalpando mantuvo la calma para enviar su tiro al fondo tras golpear el poste, y finalmente Fernanda Monroy firmó el penal decisivo. El VAR revisó el último intento brasileño, pero confirmó que el balón no cruzó la línea, sellando la victoria mexicana por 3-1.
La actuación de Murrieta ya se considera parte del legado del futbol femenil mexicano. Sus intervenciones clave impulsaron al equipo hacia un podio mundial que quedará grabado en la memoria.
Gol y empate para un Tercer lugar
La segunda mitad estuvo marcada por un desgaste físico intenso y un intercambio constante de ataques. Brasil abrió el marcador al minuto 78 por conducto de Kaylane, quien aprovechó un rebote para adelantar a su selección en un momento determinante.
México respondió con valentía y mantuvo la presión en campo rival. En el minuto 85, el VAR revisó un posible penal a favor del Tri, pero la árbitra determinó que no existió infracción suficiente para marcar la falta.
El empate llegó en el tiempo agregado, al 90+5, cuando Evelin, defensora brasileña, envió el balón a su propia portería tras un centro peligroso del Tri. Este autogol revivió las esperanzas mexicanas y llevó el partido al alargue emocional de los penales.
Murrieta volvió a ser determinante en la tanda, sellando así el bronce para México. El resultado fue celebrado como una hazaña deportiva en un torneo dominado por la intensidad y la calidad de las selecciones juveniles.
México celebra un bronce que sabe a oro para el futbol femenil
El Tri Femenil se subió al podio mundial con un tercer lugar que refleja el esfuerzo, la preparación y el carácter de un equipo decidido a trascender. La generación Sub 17 demostró temple ante una potencia histórica como Brasil y se ganó el reconocimiento internacional.
Este logro refuerza el crecimiento del futbol femenil mexicano, que en los últimos años ha consolidado talento, estructura y visión competitiva. Las Adelitas del Tri mostraron que el futuro es prometedor y que están listas para seguir brillando.
Más que un trofeo, México Femenil conquistó el corazón de un país que celebró su entrega y garra. Este bronce sabe a oro y marca un paso firme hacia nuevas metas y sueños para el futbol femenil nacional.