México ocupa el primer lugar mundial en número absoluto de casos de bullying, según datos de Bullying Sin Fronteras y la OCDE, más de 28 millones de estudiantes se encuentran en situación de riesgo. A esto se suma el hecho de que 7 de cada 10 alumnos han presenciado o vivido acoso escolar, de acuerdo con estadísticas oficiales de la SEP, en solo cinco años, los reportes de violencia escolar crecieron un 205%, reflejando una crisis estructural con graves repercusiones psicológicas, sociales y económicas.

Así se dio a conocer en foro “Aulas sin Miedo: Diálogo por Entornos Escolares Libres de Violencia”, un encuentro donde expertos del ámbito educativo, jurídico, tecnológico y de salud mental, hicieron un llamado urgente a la acción nacional.

El foro tuvo como objetivo reflexionar sobre el fenómeno del acoso escolar en todas sus manifestaciones física, verbal, psicológica, social y digital, y generar propuestas de atención, prevención e intervención articuladas entre instituciones educativas, legisladores, organizaciones civiles, familias y expertos.

El Lic. Óscar David Hernández Carranza, presidente del Consejo Directivo de PAB, (Plataforma Antibullying), abordó el impacto económico de esta violencia escolar.

“El bullying le cuesta al país más de siete mil millones de pesos anuales en atención médica, salud mental y pérdida de productividad”, afirmó. Destacó que invertir en programas de prevención no solo salva vidas, sino que alivia las finanzas públicas a largo plazo”, aseguró Hernández Carranza.

Durante el foro, el Dr. Carlos Ruiz, Consejero Honorífico Antibullying, compartió experiencias internacionales exitosas, señalando que “países como Finlandia y Corea del Sur han logrado reducir hasta en un 40% los casos de bullying escolar mediante protocolos bien estructurados y en constante revisión”. Comparó la importancia de estos protocolos con las normas ISO en calidad educativa, subrayando su efectividad y bajo costo.

Por su parte, la Mtra. Tania Martínez Lizárraga, Directora de la Unidad de Medicina Clínica de la Universidad Panamericana, señaló que en cinco años los reportes de casos de bullying aumentaron un 205%, por lo que las afecciones en salud mental se ven reflejadas en problemas de autoestima, trastornos de ansiedad y depresión, estrés postraumático, rendimiento escolar, riesgo de suicidio, entre otros.

“El bullying no solo lastima el cuerpo, hiere la mente. Proteger la salud mental es crear aulas sin miedo”, dijo Desde el enfoque legal, Ana Lucía Medina, cofundadora de la organización de activismo Digital SocCivilMX, advirtió que solo 8 estados del país cuentan con legislación específica sobre bullying.

Denunció que esta falta de armonización normativa impide una respuesta efectiva y uniforme, y propuso la creación de una asignatura obligatoria sobre prevención del delito y convivencia escolar.

Otra de las especialistas en redes y seguridad digital, quienes asistieron al evento, Ximena Arizmendi Juárez, explicó que 1 de cada 3 adolescentes ha recibido amenazas o insultos en redes sociales, y advirtió que el ciberbullying está vinculado con un aumento de pensamientos suicidas y consumo de sustancias. Propuso programas de alfabetización digital desde temprana edad y una mayor colaboración con plataformas tecnológicas.

El foro cerró con una sesión de diálogo abierta entre expertos, medios de comunicación y asistentes. Las propuestas clave serán sistematizadas en un documento de recomendaciones que se pondrá a disposición de legisladores y autoridades educativas para impulsar políticas públicas urgentes y coordinadas.

“Aulas sin Miedo” no solo dejó evidencia de la magnitud del problema, sino también de la voluntad colectiva para erradicarlo. Con el inicio de la revisión de la primera norma antibullying del país y el respaldo de expertos multidisciplinarios, México comienza a tomar la delantera en la lucha contra una de las formas de violencia más invisibles y devastadoras que enfrentan sus niños y adolescentes.