Frank Caprio, el juez municipal de Providence que se volvió viral por su estilo compasivo y sus sentencias cargadas de humanidad, falleció este miércoles a los 88 años, víctima de cáncer de páncreas.
Su rostro se hizo conocido en todo el mundo gracias al programa Caught in Providence, donde cada audiencia se transformaba en una conversación cercana, casi paternal, con los acusados. Lejos del estereotipo rígido del sistema judicial, Caprio ofrecía comprensión, humor y una visión restaurativa de la ley.
“Su legado no está en los fallos que dictó, sino en las vidas que tocó”, expresó su familia en un comunicado difundido en redes sociales. La noticia generó una ola de mensajes de condolencia, especialmente de quienes encontraron en sus videos una forma distinta de entender la justicia.
Caprio fue juez durante más de 40 años y presidió el tribunal municipal de Providence con una filosofía clara: “La ley debe ser justa, pero también humana”. Su enfoque inspiró a juristas, comunicadores y ciudadanos que vieron en él una figura de reconciliación entre el deber legal y la compasión social.
Uno de los episodios más recordados del juez Caprio ocurrió en 2019, cuando un hombre de 96 años, Victor Coella, fue llevado ante su tribunal por conducir a exceso de velocidad en una zona escolar. Al explicar su situación, Coella reveló que llevaba a su hijo de 63 años, enfermo de cáncer, a una consulta médica. Caprio lo escuchó con atención, lo perdonó y le dijo: “Eres un buen hombre. Realmente eres de lo que se trata Estados Unidos de América”.

