Este 22 de noviembre de 2025, el mundo de la moda lamenta la partida del diseñador irlandés Paul Costelloe, quien falleció a los 80 años tras una breve enfermedad. Según su familia, murió de manera tranquila en Londres, rodeado de su esposa y sus siete hijos.
Su legado de elegancia y clasicismo
Originario de Dublín, Costelloe inició su formación en la Grafton Academy de Diseño de Moda y más tarde se trasladó a la Chambre Syndicale de la Alta Costura en París, donde aprendió de grandes maestros. Después de trabajar con diseñadores como Jacques Esterel y en tiendas icónicas como La Rinascente de Milán y Anne Fogarty en Nueva York, fundó su propia casa de moda: Paul Costelloe Collections, en 1979.
Desde entonces, su nombre se volvió sinónimo de sofisticación: creó colecciones para mujer, hombre, bolsos, accesorios e incluso línea de artículos para el hogar.
Sus piezas se destacaban por su atención al detalle, uso de telas de alta calidad y un estilo atemporal que combinaba lujo con accesibilidad.
Su vínculo con la princesa Diana
Uno de los capítulos más recordados de su carrera es su colaboración con Diana, princesa de Gales, para quien fue diseñador personal desde 1983 hasta su muerte en 1997.
Sus creaciones para ella se volvieron icónicas, y su nombre se consolidó aún más cuando empezó a desfilar año tras año en la Semana de la Moda de Londres, desde la primera edición en 1984.
Reconocimiento en Irlanda y más allá
Más allá de sus conexiones reales, Costelloe también dejó huella en su país natal. Durante décadas, lanzó colecciones accesibles en Irlanda mediante su colaboración con Dunnes Stores, lo que permitió que muchas personas portaran su visión de moda elegante sin alejarse de sus presupuestos.
Como diseñador, estaba profundamente orgulloso de sus raíces irlandesas. En una entrevista reciente, dijo que lo que más le gustaba era encontrarse con personas que usaban sus prendas en la calle y recibir un cumplido espontáneo: “Los irlandeses son muy rápidos para felicitarte”, decía con cariño.
Despedida y tributos
Su familia pidió respeto a su privacidad en estos momentos difíciles. “Estamos profundamente tristes de anunciar el fallecimiento de Paul Costelloe tras una breve enfermedad”, comunicó la firma.
Líderes políticos también han expresado su pesar: el vice primer ministro irlandés, Simon Harris, recordó su talento, disciplina y la marca duradera que dejó en la industria.
Colegas y diseñadores también le rindieron homenaje. Edel MacBride, su amiga de muchos años, lo describió como un “maestro y caballero”, mientras que otros destacaron su creatividad, su calidez humana y su legado inesperadamente cercano al público gracias a sus líneas asequibles.
Un vacío en la moda pero un legado que perdura
Con su fallecimiento, se cierra una etapa importante de la moda contemporánea. Costelloe no solo fue un diseñador de lujo, sino un creador que supo llevar la elegancia irlandesa a los escenarios globales. Su carrera abarcó más de cuatro décadas, y su firma seguirá siendo un puente entre la tradición, la practicidad y el refinamiento moderno.
Hoy, su nombre se recuerda con gratitud: por su visión, su humildad y por demostrar que la moda puede ser tanto accesible como sofisticada.