Política al Margen

Política al Margen

Sntsader, Nacho Castillo su Dueño


Otro de los muchos casos de ese nefasto caciquismo aparece ahora en el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sntsader), donde desde hace más de tres décadas el mando abierto u oculto lo detenta Ignacio Castillo Flores quien, por cierto, todavía quiere obligar a la base trabajadora a que se inscriban y voten por el moribundo PRI.

El pasado lunes 1 de septiembre, se realizó la votación para la renovación de la dirigencia nacional; y, lejos de ser un ejercicio democrático, todo el proceso estuvo marcado por anomalías, inequidades y un esquema de control corporativo que mantiene el “castillismo”.

Bajo la figura de la Comisión Nacional Consultiva, el exdiputado priísta Nacho Castillo ha orquestado en la sombra todas esas maniobras, junto con Pedro Escárcega, presunto dirigente del sindicato. Bloquean cualquier intento de renovación y perpetúan un esquema de corrupción disfrazado de legalidad. Controlan las secciones sindicales en los estados e impiden que actúen con autonomía.

Casi todas los seccionales están coludidas con el Comité Ejecutivo Nacional (CEN), despliegan campañas anticipadas y abiertas a favor de la planilla Verde. Utilizan recursos sindicales, difunden propaganda proselitista y hasta amenazan a los trabajadores para obligarlos a respaldar al grupo oficialista.

A ello se suma el evidente conflicto de intereses: la mayoría de los integrantes de la planilla Verde ya forman parte del actual CEN. En lugar de abrir espacio a nuevas voces, ellos mismos se postulan para diferentes cargos, rotando de cartera en cartera, sin rendir cuentas de sus gestiones pasadas ni pedir licencia a sus puestos.

Quien hoy funge como secretario de Finanzas será secretario de Organización; el de Prestaciones irá a Escalafón; quien controla la Transparencia se postula para Comunicación Social… Este reciclaje de cargos impide cualquier renovación real y confirma que el proceso electoral fue diseñado para perpetuarse en el poder. Más allá de esas prácticas, persisten otras irregularidades graves.

Todo eso evidencia que la elección del 1 de septiembre en el Sntsader estuvo viciada de origen, canceló la voluntad libre de los trabajadores y mantuvo el cacicazgo sindical con sus privilegios. Ante ello, la disidencia reclama que las autoridades laborales declaren nula la elección, y que los trabajadores logren auténtica democracia sindical. Extirpen ese cáncer en México…

argondirector@gmail.com y argonmexico@gmail.com

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *