Este martes, tras una reunión en la ciudad de Yedá, a orillas del mar Rojo, Ucrania respaldó una propuesta de Estados Unidos para establecer un alto al fuego de 30 días con Rusia. Según un comunicado emitido por las autoridades ucranianas, el acuerdo representa un paso importante en la desescalada del conflicto y la cooperación internacional.
Como parte de este acuerdo, Washington aceptó retirar las restricciones a la ayuda militar y al intercambio de información de inteligencia con Ucrania, lo que fortalece la relación entre ambos países en términos estratégicos y defensivos. Este gesto busca reforzar la capacidad de Ucrania para responder ante futuros desafíos en el conflicto con Rusia.
Además del cese temporal de hostilidades, las partes involucradas acordaron avanzar en la firma de un pacto que permitirá a Estados Unidos explotar recursos minerales en territorio ucraniano. De acuerdo con el comunicado oficial, este acuerdo se cerrará “lo antes posible”, marcando una nueva fase en la cooperación económica entre ambos países.
El alto al fuego de 30 días representa una oportunidad para la diplomacia y la búsqueda de soluciones sostenibles al conflicto. Sin embargo, aún queda por verse cómo responderán las partes involucradas y qué impacto tendrá este acuerdo en la estabilidad regional.