De acuerdo a las primeras investigaciones del ataque denunciado ayer en redes sociales por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en Grand Blanc Township, Michigan, fue un ex militar veterano de la guerra de Irak protagonizó un violento ataque en un templo de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, dejando al menos cuatro personas fallecidas por impactos de balas, dos cuerpos encontrados en el incendio y ocho heridos, según reportes oficiales preliminares.
Se explicó que alrededor de las 10 de la mañana, justo cuando los feligreses se reunían para el culto dominical cuando el agresor, un hombre de 40 años originario de Burton, veterano de la guerra de Irak, identificado como Thomas Jacob (Jake) Sanford, estrelló su vehículo contra el edificio ubicado en McCandlish Road. Acto seguido, prendió fuego al templo y abrió fuego contra los asistentes, generando una escena de pánico y destrucción.
Las llamas se propagaron rápidamente, alcanzando la quinta alarma, lo que indica una emergencia de gran magnitud.
Algunos testigos reportaron que varias personas quedaron atrapadas dentro del edificio mientras el fuego consumía la estructura. Videos compartidos en redes sociales mostraban columnas de humo elevándose sobre el vecindario, mientras los servicios de emergencia luchaban por controlar el incendio.
La policía local y los bomberos acudieron de inmediato al lugar, enfrentando no solo el fuego, sino también la amenaza activa del tirador, quien tiene un cartel de “Detengan a Trump” en su casa en 4156 E Atherton Rd.
El atacante fue abatido en el sitio por las fuerzas de seguridad. Aunque la situación fue controlada, las autoridades pidieron a la población mantenerse alejada para facilitar las labores de rescate y evaluación de daños.
De acuerdo a la agencia Reuters la policía informó del hallazgo de al menos cuatro cadáveres más entre los restos carbonizados de la iglesia, que aún no había sido despejada y podría contener otras víctimas.
“Hay algunos que no se encuentran registrados”, dijo el jefe de policía del municipio de Grand Blanc, William Renye, en una conferencia de prensa. Cientos de personas estaban en la iglesia cuando Sanford entró al edificio, dijo Renye.
El Departamento de Policía de Grand Blanc señaló que aún se investigan los motivos detrás del ataque.
El FBI se sumó a la investigación, calificando el hecho como “cobarde y criminal
Hasta el momento, se ha confirmado la muerte de 4 personas y 8 lesionados, algunos por impactos de bala y otros por quemaduras o lesiones relacionadas con el colapso parcial del edificio.
La identidad de las víctimas no ha sido revelada, y se habilitaron centros de reunificación para familiares en el pabellón al norte y el teatro Trillium, cercanos al lugar del incidente.
La gobernadora de Michigan y otras figuras políticas expresaron su solidaridad con las víctimas y sus familias, condenando el ataque y destacando la necesidad de proteger los espacios de culto.
Un veterano de la Guerra de Irak es el responsable del ataque a la comunidad de Grand Blanc, Michigan .
De acuerdo a las primeras investigaciones del ataque denunciado ayer en redes sociales por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en Grand Blanc Township, Michigan, fue un ex militar veterano de la guerra de Irak protagonizó un violento ataque en un templo de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, dejando al menos cuatro personas fallecidas por impactos de balas, dos cuerpos encontrados en el incendio y ocho heridos, según reportes oficiales preliminares.
Se explicó que alrededor de las 10 de la mañana, justo cuando los feligreses se reunían para el culto dominical cuando el agresor, un hombre de 40 años originario de Burton, veterano de la guerra de Irak, identificado como Thomas Jacob (Jake) Sanford, estrelló su vehículo contra el edificio ubicado en McCandlish Road. Acto seguido, prendió fuego al templo y abrió fuego contra los asistentes, generando una escena de pánico y destrucción.
Las llamas se propagaron rápidamente, alcanzando la quinta alarma, lo que indica una emergencia de gran magnitud.
Algunos testigos reportaron que varias personas quedaron atrapadas dentro del edificio mientras el fuego consumía la estructura. Videos compartidos en redes sociales mostraban columnas de humo elevándose sobre el vecindario, mientras los servicios de emergencia luchaban por controlar el incendio.
La policía local y los bomberos acudieron de inmediato al lugar, enfrentando no solo el fuego, sino también la amenaza activa del tirador, quien tiene un cartel de “Detengan a Trump” en su casa en 4156 E Atherton Rd.
El atacante fue abatido en el sitio por las fuerzas de seguridad. Aunque la situación fue controlada, las autoridades pidieron a la población mantenerse alejada para facilitar las labores de rescate y evaluación de daños.
De acuerdo a la agencia Reuters la policía informó del hallazgo de al menos cuatro cadáveres más entre los restos carbonizados de la iglesia, que aún no había sido despejada y podría contener otras víctimas.
“Hay algunos que no se encuentran registrados”, dijo el jefe de policía del municipio de Grand Blanc, William Renye, en una conferencia de prensa. Cientos de personas estaban en la iglesia cuando Sanford entró al edificio, dijo Renye.
El Departamento de Policía de Grand Blanc señaló que aún se investigan los motivos detrás del ataque.
El FBI se sumó a la investigación, calificando el hecho como “cobarde y criminal
Hasta el momento, se ha confirmado la muerte de 4 personas y 8 lesionados, algunos por impactos de bala y otros por quemaduras o lesiones relacionadas con el colapso parcial del edificio.
La identidad de las víctimas no ha sido revelada, y se habilitaron centros de reunificación para familiares en el pabellón al norte y el teatro Trillium, cercanos al lugar del incidente.
La gobernadora de Michigan y otras figuras políticas expresaron su solidaridad con las víctimas y sus familias, condenando el ataque y destacando la necesidad de proteger los espacios de culto.

