El monarca británico será el primero en orar públicamente con un Papa desde la Reforma protestante de 1534
Ciudad del Vaticano, 22 de octubre de 2025. — El rey Carlos III del Reino Unido está a punto de marcar un hito histórico al convertirse en el primer monarca británico en rezar junto a un Papa en más de 500 años, un encuentro que simboliza la reconciliación entre la Iglesia de Inglaterra y la Iglesia católica.
El histórico momento se llevará a cabo en la Capilla Sixtina, bajo el icónico techo pintado por Miguel Ángel, durante la visita de Estado que Carlos III y la reina Camila realizarán al Vaticano los días 22 y 23 de octubre. El servicio ecuménico especial reunirá a clérigos y coros de ambas confesiones religiosas, con la participación conjunta del Coro de la Capilla Sixtina, el Coro de la Capilla de San Jorge y el Coro de la Capilla Real de Su Majestad.

El servicio se centrará en la protección de la naturaleza, reflejando el compromiso del Rey con causas medioambientales, y servirá como muestra de armonía entre las tradiciones católica y anglicana.
Según fuentes reales, este será el primer momento en que un monarca británico y un Papa rezan juntos en un servicio compartido desde la separación de Enrique VIII de Roma en el siglo XVI.
Además, Carlos III participará en un servicio en la iglesia de San Pablo Extramuros, donde será nombrado “cofrade real”, un título honorífico y espiritual que reconoce su labor de décadas en la construcción de puentes entre religiones. La iglesia, que alberga la tumba de San Pablo, tiene históricas vinculaciones con la monarquía inglesa, incluida la exhibición de la insignia de la Orden de la Jarretera.
La visita incluirá reuniones con el Papa y altos funcionarios del Vaticano, reforzando las cordiales relaciones entre ambos credos. Este viaje se reprogramó tras el aplazamiento de la visita anterior debido a la mala salud del Papa Francisco, predecesor de León XIV.
Un portavoz de la Iglesia de Inglaterra señaló que el título de cofrade real es un reconocimiento al compromiso del Rey por encontrar puntos comunes entre religiones y unir a las personas, mientras que el Ministerio de Asuntos Exteriores de Reino Unido destacó la importancia de la visita, recordando que “la Iglesia católica es la mayor denominación de la religión más importante del mundo”.
Este encuentro representa no solo un gesto histórico de reconciliación, sino también un reflejo del compromiso de Carlos III con el diálogo interreligioso y la construcción de puentes entre culturas y creencias.