Bien dicen que el mundo moderno siempre sorprende y esta vez, la historia comenzó con un paso sumamente importante, no solo por ser un hito en la Iglesia Anglicana, también por darle un espacio a una mujer en donde históricamente no tienen cupo.
La figura de Sarah Mullally vuelve a ser tendencia global luego de que su nombre surgiera como la principal propuesta para convertirse en la nueva Arzobispa en la Iglesia de Inglaterra, un hecho que sería histórico y se convertiría en un punto de giro para la institución.
Sarah Mullally es actualmente Obispa de Londres, el tercer cargo más importante en la jerarquía de la Iglesia Anglicana. Fue nombrada en diciembre de 2017 y tomó posesión en mayo de 2018, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar ese puesto en más de 1,500 años de historia.
Su posible ascenso a Arzobispa sería otro momento histórico porque la pondría al frente de la Iglesia de Inglaterra y del Sínodo General, como máxima autoridad espiritual de la Comunión Anglicana.
Una trayectoria que rompe el molde
Antes de llegar al ministerio religioso, Mullally fue enfermera profesional. De hecho, se convirtió en Jefa de Enfermería del NHS (el Servicio Nacional de Salud de Reino Unido). Es decir: fue una figura clave de las políticas sanitarias en la era pos-Thatcher.
Más tarde fue ordenada como sacerdotisa en 2001, pasó por diferentes parroquias y desde el primer día se convirtió en una de las voces más activas para que las mujeres tuvieran igualdad de derechos dentro de la Iglesia Anglicana.
¿Por qué su nombre pesa tanto ahora?
Porque representa tres cosas clave para la transición generacional de la Iglesia de Inglaterra:
- Primera mujer en puestos clave: su nombramiento como Obispa de Londres ya cambió la historia.
- Perfil profesional fuera de la iglesia: rompe el molde tradicional de los clérigos formados solo en seminario.
- postura moderada-inclusiva: tiene puentes con las alas conservadoras y las progresistas.
Este cargo ya fue aprobado por el rey Carlos III, lo que lo hace completamente oficial.
Esto sería histórico para la Iglesia de Inglaterra
Sarah Mullally se convierte en Arzobispa de la Iglesia Anglicana, sería la primera mujer en liderar el cargo más alto. Sería un mensaje directo hacia una modernización profunda en la institución que nació en el siglo XVI y que hoy tiene presencia en más de 165 países.
¿Es correcto decir ‘arzobispa?
Aunque parezca una nueva palabra en el vocabulario, debes saber que sí es correcto llamarlo de dicha manera, ya que la RAE considera que la palabra ‘arzobispa’ es la manera femenina de dicha palabra.
No escucharla tendría que ver que es un cargo que ha sido ocupado históricamente por hombres y que será está vez la primera que se ocupe por una mujer dentro de Inglaterra.
Esto es importante ya que es una gran diferencia entre la Iglesia Católica donde las mujeres no pueden ocupar un cargo tan grande como lo hacen en la Anglicana.