Una niña de 5 años murió el pasado 20 de octubre tras ser picada por un alacrán dentro de un kínder en la colonia Centro de Hermosillo. La menor fue trasladada de inmediato al Hospital de Ginecopediatría del IMSS, donde ingresó al Área de Choque para su canalización e intubación.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reconoció que, al momento del ingreso de la paciente, el hospital no contaba con suero antialacrán, aunque se consiguió rápidamente y se le administraron dos viales. A pesar de esto, la menor sufrió dos paros cardiorrespiratorios que no pudieron revertirse, falleciendo aproximadamente una hora después de su llegada.

El IMSS detalló que el hospital había recibido suero antialacrán el 17 de octubre, pero que durante el fin de semana se agotó, por lo que el lunes 20 no había disponibilidad. Nuevos viales fueron surtidos el martes 21, después del fallecimiento de la menor.
El gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, informó que se abrió una investigación oficial sobre la muerte de la niña, involucrando a la Secretaría de Educación Pública, la Secretaría de Salud y la Fiscalía General de Justicia del Estado. Durazo calificó el caso como “obviamente lamentable” y aseguró que las autoridades están brindando el máximo apoyo a la familia.
El trágico incidente ha generado cuestionamientos sobre la disponibilidad de sueros antialacrán en hospitales públicos y la respuesta ante emergencias pediátricas, así como la prevención de accidentes en centros educativos.